En el mundo del ciclismo y en el mundo del triatlón, los potenciómetros están a la orden del día. En cambio, en el mundo de la carrera estamos como Alfredo Landa en “Vente para Alemania Pepe”. Dicho de otra manera, vamos unos cuantos pasos por detrás.
La potencia es un parámetro que tiene muchas virtudes. Entrenar en base a ella, puede que sea el futuro del entrenamiento de trail running (sin volvernos locos, ¿ok?).
Ya sabes que en la montaña los ritmos no nos valen y las pulsaciones nos pueden pasar una mala jugada. Entonces, ¿qué nos queda? Las sensaciones y ahora, la potencia.
¿Qué es la potencia?
El otro día te hablaba del entrenamiento de fuerza en trail running y te contaba que cuando corres, cuando tu pie entre en contacto con el suelo, aplicas una fuerza. Será esta cantidad de fuerza y la rapidez con la que la aplicas, la culpable de que corras más rápido o menos rápido.
Cuando más fuerza apliques y más rápido lo hagas, mayor será tu velocidad al correr.
Pues bien, la potencia (P) es eso: la fuerza aplicada (F) por la velocidad de aplicación (V).
P = F x V
¿Nos gusta la potencia?
Sí, nos gusta. Tiene unas características que hacen que mole. “Manu, dime ya esas características, por favor”. Voy, voy. ¡Qué ansia!
Medición directa de la fuerza
La potencia nos va a dar un dato directo de la fuerza aplicada, mientras que la frecuencia cardiaca nos da un valor indirecto.
Como te he dicho antes, P = F x V.
Medición directa del trabajo realizado
La potencia (P) es el trabajo (W) efectuado por unidad de tiempo (t)
P = W/t
Si dejamos la W sola queda:
W = P x t
Es decir, si sabes la potencia de tu entrenamiento y sabes el tiempo de entrenamiento, podrás saber el trabajo realizado de forma directa.
La frecuencia cardíaca solo es la reacción cardíaca al trabajo realizado. No mide el trabajo, nos da un valor de referencia indirecto.
La potencia se manifiesta instantáneamente
Esto es muy interesante si tu entrenador te dice, por ejemplo, “vete a la montaña y corre 10 segundos en Z5”.
Déjame que te explique. Z5 hace referencia a una intensidad muy alta y la frecuencia cardiaca correspondiente a esa zona Z5 no la vas a alcanzar en 10 segundos.
En cambio si Z5 te lo da en potencia, sí que podrás ejecutar correctamente el entrenamiento. ¿Por qué? Porque la potencia se manifiesta instantáneamente en cuanto te lanzas a correr, mientras que la frecuencia cardíaca va con retardo.
Esto es muy útil sobre todo a intensidades altas.
La potencia se ve poco afectada por variables externas
La potencia es un parámetro bastante estable.
La frecuencia cardíaca se ve afectada por edad, temperatura ambiente, temperatura central, la altitud, la alimentación, ritmo circadiano, deshidratación, posición a la que se realice el deporte, masa muscular implicada en el deporte, etc.
¿Tiro mi pulsómetro a la basura?
No, también nos gusta el pulsómetro.
Con todo lo que te he contado sobre la potencia, parece que la frecuencia cardiaca es “la amiga fea”. Para nada, son igual de bonitas, solo que cada una tiene sus virtudes.
Zonas de entrenamiento
La frecuencia cardiaca (Fc) a penas sufre variaciones a lo largo de la temporada, es decir, las zonas de entrenamiento van a ser bastante estables si te fijas en la Fc.
En cambio, la potencia sí que varía bastante, por lo que las zonas de entrenamiento se modifican más. Tendrás que hacer más test para saber en qué puntos estás.
Correlación con el consumo de oxígeno
“La frecuencia cardiaca presenta una relación lineal casi perfecta con la demanda energética aeróbica a la que se somete el atleta (%VO2max)” J.G. Pallarés.
Por lo tanto, nuevamente, es un buen indicador de la intensidad del esfuerzo y te ayudará a calcular con precisión las zonas de entrenamiento.
Salud
La frecuencia cardiaca puede ayudarte a detectar estados de deshidratación, de fatiga, de sobreentrenamiento o de infección.
Como verás, no se trata de abanderarte de ningún parámetro ni de ningún cachivache tecnológico. Lo adecuado es que conozcas todo lo que tienes al alcance de tu mano. Como deportista, tienes que saber interpretar todos los números que te da la tecnología y esto saber integrarlo con tus propias sensaciones.
Eso es entrenar.
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